Este término fue difundido para darle un nombre a la poca «resistencia emocional» que se observa en algunos jóvenes de la generación Millennial y Z, desde la perspectiva de generaciones pasadas. Mientras mayor sea la generación, menor sería su contacto con la salud mental y la tendencia a reprimir y estigmatizar problemas de todo tipo pese a que en medida ahora son las que enfrentan los jóvenes pero de diferente manera.
Actualmente, los jóvenes de hoy son constantemente criticados por su sensibilidad, la que es percibida como fragilidad, siendo percibidos emocionalmente débiles, cuando en realidad el poder hablar y exteriorizar los sentimientos, requiere de mucha fortaleza emocional.
Durante la pandemia se pudo interiorizar en la mayoría de las generaciones la importancia de la salud mental para el desarrollo óptimo y mejorar la capacidad de afrontamiento. A pesar de que a esta generación se le ha criticado de quejarse de todo y tener baja capacidad de tolerancia a la frustración, también hay que recordar que es una generación que no visualiza, ni se conforma con seguir los parámetros establecidos, ya que busca y se arriesga con otras estrategias. Además, el poco temor a hablar sobre las injusticias.
Una de las causas que se cree de esta formas de enfrentar las adversidades es la sobreprotección con la que muchos han crecido, ya que hubo un cambio en la crianza y educación por parte de los padres, diferente a la que tuvieron las demás generaciones, cuya crianza era mucho más estricta o distante, y en consecuencia, una crianza menos afectuosa y/o expresiva.
Es importante resaltar, el efecto de la transformación digital al que los jóvenes están expuestos, las comunicaciones, críticas y comparaciones por las redes sociales, puede llevarlos a ser potencialmente vulnerables. No obstante, esta generación no ha tenido el miedo para expresarse libremente y defender causas como la contaminación, corrupción, violencia, racismo, homofobia, luchas que en definitiva muestran fortaleza frente a la convicción y decisión de algunos miembros de esta generación.
Finalmente, todas las generaciones han tenido sus dificultades y a lo largo de los años han adquirido ciertas características que los definen. Es el mismo tiempo que podemos dar a las nuevas generaciones porque aún no terminan de crecer y desarrollarse completamente. Mientras tanto, tengamos la responsabilidad de criar a nuestros hijos para la vida, fortalecer su autoestima, brindar seguridad y
Psic. Ana Dextre
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