Es importante resaltar una idea central sobre las emociones, todas nos sirven, todas tienen una función y eso es algo que muy probablemente no hemos tenido la oportunidad de aprender en la escuela o en la universidad. Incluso podemos hablar de ideas y creencias de que una persona por ser del sexo femenino o masculino se ledebe restringir ciertas emociones, eso debido a que aún estamos inmersos en una cultura que está en un proceso de superar las limitaciones de una actitud machista al respecto, y eso involucra ambos, en ocasiones solemos no darle validez al enojo en las mujeres o la sensibilidad y tristeza en los varones. Dicho esto, me gustaría compartir ideas sobre una emoción particular: El enojo.
Cuántas veces hemos escuchado o dicho «No te enojes» o simplemente «Cálmate», es entendible, pero me gustaría ensayar respuestas diferentes, nuevas y creativas. Creo que hay una gran oportunidad para fortalecer nuestra empatía. Se me ocurre abordar por ahí el tema, ¿Cómo responder frente al enojo? A continuación, una serie de alternativas y sugerencias saludables.
1. «Comprendo tu enojo, pero cuéntame más, ¿Qué pasa? ¿Frente a qué estás enojada exactamente?». Podemos ensayar esta respuesta en vínculos donde hay una profunda conexión emocional, en dichos vínculos, al mirar a los ojos podemos tener una idea de lo que está sintiendo la otra persona.
2. «Veo que estás enojado». Con esta simple frase podemos tener una mejor influencia sobre la persona enojada, tanto el enojo es como cualquier emoción que pide ser reconocida. Reprimirla con frases como «no te enojes», paradójicamente, puede hacer que este aumente.
3. Todo tiene límites. «¿Esa es la manera de manifestar tu enojo?, no estoy dispuesta a tolerarlo, si te ofendi disculpame, evitaré hacerlo en el futuro». Podemos ensayar este discurso en los niveles más extremos donde podría existir el riesgo de violencia.
El enojo tiene el poder de aumentar nuestra energía, no la dirijamos de forma destructiva sino de forma constructiva. Utilicemos esta energía extra para crecer como personas, para aplicar los cambios en nuestra forma de vivir con mucha disciplina. Prestemos atención a nuestras emociones y estas fluirán para dar paso a otras.
Recuerda que el enojo no es malo, podemos utilizar esa energía para salir adelante. Si piensas que te cuesta mucho poder controlarlo, estamos para ayudarte.
Lic. Psic. Fiorella Tinoco Salcedo.
PSICOLOGÍA INTEGRAL YO PUEDO.
991 988772 / 965 703600