El amor es un sentimiento de afecto donde existe el interés del bienestar del otro, sumado a la intensión de compartir momentos de interacción y proximidad que permitan la oportunidad de expresar este sentimiento. Este vínculo se desarrolla con el tiempo y se ve reforzado por eventos en los que se puede hacer evidente las cualidades y/o reciprocidad del otro. Muchas veces escuchamos esta palabra relacionada solo al amor de pareja, lo cierto es que el amor no solo está relacionado a la pareja, también se vincula a todo sentimiento de afecto por ejemplo el de padres e hijos, entre hermanos, etc.
Se habla mucho del amor y se idealiza el amor como un estado permanente de intensidad que nos permite gozar de momentos de felicidad, no obstante, el amor puede tener momentos de expresión llenos de intensidad, sin embargo, también es cierto que el amor se alimenta de detalles, y a veces puede existir amor y la forma de expresarlo no necesariamente permite su reconocimiento. Muchos confunden el amor con el apego o la dependencia, especialmente cuando hablamos de amor de pareja, ese amor que hiere, ese “amor” que agobia, posterga, incluso denigra, confundimos dependencia por apego con “amor”, una situación muy usual en nuestros tiempos, siendo esta configuración del amor lo que define una relación disfuncional de pareja.
Para poder hacer una mejor identificación de las diferencias del amor y la dependencia emocional por apego, a continuación, detallamos:
Amor saludable
- Te puedes permitir amar sin reparos, confías en la otra persona, por lo tanto, no tienes restricciones a la hora de amar ni de demostrarlo.
- Te sietes amada o amado como eres, estás consciente que hay cosas que pueden no agradar a tu pareja y podrías mejorar en ello, sin embargo, sabes que te acepta con tus virtudes y defectos.
- No tienes que ser otra persona para sentirte amado o amada, pues tu pareja te ama por quien eres.
- Tus logros y metas son importantes y tu pareja celebra y entiende su importancia para ti.
- Puedes estar para apoyar y también para recibir su apoyo, tú no estás para hacerte cargo de él o ella ni viceversa.
Dependencia por apego emocional
- Tienes la necesidad de hacer lo que fuera y permitir incluso aquello que no te agrada con tal de ser aceptada o aceptado por quien consideras que amas.
- La idea de no tener a esa persona a tu lado te agobia al punto de no sentirte completa o completo, crees necesitar de esa persona para estar bien.
- Estás dispuesta o dispuesto cada vez que esa persona te busca o tiene la disposición para verte, tus intereses o necesidades pasan a un segundo plano.
- Cada pequeña señal de interés de la otra persona puede llegar a ser sobredimensionada como una señal de amor.
- Tu amor propio se ve opacado por el supuesto amor al otro.
Si por alguna razón te sientes identificado con este segundo grupo, es momento que tengas presente el amor básico, ese amor que nos mueve y direcciona nuestras propias vidas: el amor Propio, ese amor que nos permite recibir de nosotros mismos ese afecto y consideraciones que a veces esperamos de los demás, para amar sanamente debemos empezar por darnos ese amor de la manera más intensa y pura que podemos ofrecer para nosotros mismos. En el día del amor, recuerda amarte cada día, aceptarte tal cual y estar siempre para ti.
Lic. Sarela Quiroz
Psicóloga Psicoterapeuta
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