Los miedos forman parte de la infancia. Desde esconderse detrás del sofá cuando se oían ruidos fuertes, hasta prender la luz para dormir, o el miedo al monstruo bajo la cama que iba a salir a comernos.
Son muchas las situaciones que provocan miedo en los niños; de hecho, hay edades en las que evolutivamente hablando es normal presentar algunos temores típicos. Por ejemplo, en torno a los dos años aparece el miedo al “abandono” o separación de los padres, y de los cuatro años en adelante lo más común es el miedo a la oscuridad, a los ruidos fuertes, a los payasos , incluso a algunos animales.
Para que los niños puedan superar sus miedos, la actitud de los padres es esencial. Es necesario que los padres sepan que el miedo es algo normal en todas las personas y que deben respetar el temor de sus hijos, no obstante, puedan enseñarles a superarlos.
Entonces, ¿cómo podemos ayudar a los niños a vencer sus temores? Además de la paciencia y comprensión, les dejaremos una lista de tips para que los tengan presentes cuando los pequeños se sientan temerosos:
- No lo asuste con historias de ogros, fantasmas, monstruos, etc., como una forma de “volverlos valientes”. Tienen que saber que esos personajes no existen en la vida real y no son una amenaza para ellos.
- Si su hijo dice que tiene miedo, no se ría, burle, mucho menos le llame la atención. Si se le ridiculiza, la confianza del niño disminuirá y no querrá compartir sus temores por vergüenza.
- Hablar con el niño sobre sobre las cosas que le dan miedo. Así tendrá una idea más clara sobre lo que le asusta, qué siente y cómo puede ayudarlo a superarlo.
- Ayúdele a prepararse emocionalmente para enfrentar una situación. Por ejemplo, si le da miedo ir al kínder, oiga sus razones, llévelo de visita y muéstrele su salón, hable sobre las cosas nuevas que aprenderá ahí y los nuevos amigos que tendrá.
- Si el pequeño se encuentra muy ansioso, puede utilizar técnicas de respiración para que se tranquilice y luego, analizar juntos la situación para demostrarle que no hay nada que temer.
- No aleje totalmente de las fuentes que generan miedo a su niña (o), abrácelo, hágale saber que está seguro, que Ud. Está a su lado y aproxime poco a poco al niño de forma que se acerque poco a poco hasta que ya no tenga miedo.
Si los miedos de tu niño persisten, y llega a verse dificultades al dormir o integrarse a un grupo, recuerda que puedes buscar ayuda psicológica para orientarte.
Psic. Andrea González
Psicología Integral Yo Puedo
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